Jubilación ordinaria 

¿Qué es la jubilación ordinaria?

La jubilación ordinaria es el momento en que una persona se retira de su trabajo y recibe una pensión por el resto de su vida. La mayoría de las personas eligen jubilarse a los 67 años, pero pueden hacerlo a cualquier edad si tienen ciertos requisitos.

Requisitos: ¿Quién puede acceder a la jubilación ordinaria?

Si has dejado tu trabajo y quieres pedir la jubilación, es recomendable que solicites la pensión lo antes posible. Si pasan más de tres meses desde que dejas el empleo, el Instituto Nacional de Seguridad Social (INSS) calculará tu pensión basándose en la fecha en que presentaste la solicitud, y no en la fecha en que dejaste el trabajo.

Para poder jubilarse a los 67 años en 2022, es necesario que se cumplan los siguientes requisitos:

  • Tener una cierta edad y haber cotizado durante un mínimo de 37 años y 6 meses. Si se han cotizado menos, la edad para jubilarse será de 66 años y 2 meses.
  • Debes haber terminado tu contrato laboral, es decir, estar en situación de desempleo.
  • Otro de los requisitos para solicitar la jubilación son cumplir con 15 años de cotización laboral y dos de ellos dentro de los 15 años anteriores a la solicitud. Esto significa que si quieres jubilarte, debes haber trabajado durante al menos 15 años y dos de esos años deben ser recientes, dentro de los 15 anteriormente citados.
  • Debes estar dado de alta en la Seguridad Social (INSS).

¿Cuándo y cómo se puede solicitar la jubilación ordinaria?

Si tienes 66 años y dos meses en 2022, puedes solicitar la Jubilación Ordinaria. Si cumples 65 años en ese mismo año pero has cotizado durante 37 años y 6 meses o más, puedes jubilarte con 65 años.

Hay dos maneras de solicitar la pensión de jubilación: por internet o en persona. Si lo prefieres, puedes solicitarla online, haciendo clic aquí. Pero si prefieres ir a la Seguridad Social y pedir cita previa, primero tienes que descargarte la aplicación, llamar por teléfono o entrar en este enlace para pedirla a través de la página web.

Documentación necesaria para solicitar la jubilación

Cuando vayas a solicitar tu jubilación, ¡lleva siempre contigo tu DNI o NIE y pasaporte! Además, necesitarás el formulario de la solicitud, que indica como rellenarlo.

Si vas a solicitarla en complementos a mínimo, también tendrás que presentar el Libro de Familia, actas del Registro Civil o certificados oficiales que acrediten el parentesco con el solicitante.

Si eres extranjero, tendrás que entregar la Tarjeta de Identidad de Extranjeros o un certificado de inscripción en el Registro Central de Extranjeros. ¡Y no te olvides de llevar una persona representante legal si es necesario!

¿Cómo se calcula la jubilación ordinaria?

Cuando llegue el momento de jubilarte, la Seguridad Social te dará una pensión que dependerá de las bases de cotización que hayas tenido a lo largo de tu vida laboral. Para saber cuánto cobrarás, primero tienes que calcular tus bases de cotización durante los últimos 24 años.

Para ello, toma el último año en el que hayas trabajado (el causante) y multiplícalo por 12 (meses del año). Luego, suma todos los meses en los que hayas cotizado durante ese periodo. Una vez hayas hecho esto, divide el total entre 336 (los meses en un año). Este es el resultado: la pensión que recibirás será equivalente al 60% de esa cantidad.

¿Cuál es la pensión mínima de la jubilación ordinaria?

En España, la cifra mínima es de 11.914 euros al año si tienes un cónyuge a cargo, pero si no dependes económicamente de tu pareja la cantidad es de 9.164 euros. Si no tienes a nadie a cargo, la pensión mínima es de 9.655 euros anuales.

¿Qué pasa si tengo periodos laborales no cotizados?

Si hay algún período de cotización que no has cotizado, no te preocupes, puedes integrar a cada 0 que aparece en tu base de cotización la base mínima legal que esté vigente (Solo para los primeros 48 meses). Te lo explicamos detalladamente en este artículo sobre lagunas de cotización.

Complemento de brecha de género y de maternidad

Este nuevo complemento es una buena noticia para las mujeres, ya que les ayuda a reducir la brecha de género. Además, ahora los hombres también pueden cobrar por maternidad, lo cual es un avance importante. Y por último, se puede cobrar la prestación con tan solo un hijo, lo cual es beneficioso para las familias. La cantidad que se recibe es de 27 euros por hijo, lo cual es una buena ayuda económica para estas.

¿Cómo se pasa de jubilación parcial a ordinaria?

Sí, se puede cambiar de la jubilación parcial a la ordinaria una vez que cumplas la edad legal de jubilación. Para solicitar el cambio, tienes que presentar una nueva solicitud en la Seguridad Social. También es posible aplicar a la jubilación anticipada si cumples con todos los requisitos.

Bonificaciones por demora de la edad de jubilación ordinaria

Hay distintas edades para jubilarse, según la ley, pero si se accede a la pensión de jubilación a una edad superior a la edad ordinaria de jubilación, el beneficiario cobrará un porcentaje o cantidad adicional. Por ejemplo, si se decide retrasar la jubilación un año, se podrá optar por recibir un 4% adicional de la pensión, o bien una cantidad fija de dinero, sin importar cuánto se cobre en total.

Hay que tener en cuenta que estas bonificaciones solo se dan si se cumple con ciertos requisitos: primero, que se haya cotizado durante toda la vida laboral; y segundo, que se acceda a la pensión después de cumplir la edad ordinaria de jubilación. Si no se cumplen estos requisitos, no hay derecho a las bonificaciones.

Ventajas de la jubilación ordinaria sobre otras modalidades

La jubilación ordinaria es la forma más común de jubilarse en muchos países. Existen otras modalidades de jubilación, pero la jubilación ordinaria tiene muchas ventajas y beneficios que la hacen superior a las demás.

  • En primer lugar, la jubilación ordinaria ofrece una pensión que es permanente y estable. La pensión no puede ser cancelada ni reducida sin el consentimiento del titular, lo que la hace muy segura. Además, es una buena forma de asegurarse un ingreso regular durante el resto de nuestra vida.
  • En segundo lugar, la jubilación ordinaria es fácil de obtener. No hay que pasar por ningún proceso complicado ni reunir ningún requisito especial. Todo lo que necesitas es cotizar durante un determinado número de años y cumplir con los requisitos legales establecidos en tu país.
  • En tercer lugar, la jubilación ordinaria ofrece una buena relación costo-beneficio. El costo de acceder a ella es relativamente bajo, ya que sólo hay que cotizar durante unos años, mientras que los beneficios son muy altos. Además, la pensión recibida es indexada al costo de vida, lo que significa que se mantendrá constante aun si el costo de vida sube en el futuro.
  • Por último, la jubilación ordinaria tiene una gran flexibilidad. Puedes elegir cuándo quieres jubilarte y recibir tu pensión, ya sea a los 55 años, 60 años o incluso después. También puedes elegir qué cantidad quieres recibir cada mes y combinarla
    con otros ingresos para tener una mayor estabilidad económica en el futuro.

En resumen, la jubilación ordinaria tiene muchas ventajas y beneficios respecto a las demás modalidades de jubilación disponibles en el mercado. Si estás pensando en jubilarte pronto, ésta es sin duda la mejor opción para ti.

Referencias

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