Hoy te traemos una historia que te hará temblar. Un hombre de Barcelona estuvo a punto de perder su prejubilación por un solo día no trabajado. Sí, lo has leído bien, ¡un solo día! ¿Quieres saber cómo ocurrió esto? ¡Sigue leyendo!
La historia de Manel
Manel, un profesor de un colegio concertado de Badalona, decidió prejubilarse a los 64 años. Hizo todos los trámites necesarios, pero cuando llegó el momento de la verdad, se encontró con una sorpresa desagradable. La Seguridad Social le informó de que le habían denegado la prestación porque tenía 63 años y no tenía edad para la jubilación. Además, le faltaba un día más trabajado para poder acogerse a una jubilación anticipada.
La impotencia de Manel
Manel estaba desesperado. Había dejado su trabajo de manera gratuita, sin nada. No tenía derecho al paro ni a ningún tipo de prestación porque se había marchado voluntariamente del trabajo. Además, las clases ya se habían retomado y habían contratado a su sustituto. Estaba en una situación de inseguridad total.
La lucha de Manel
Manel no se rindió. Presentó su tiempo pasado en el servicio militar para sumarlo a su vida laboral y ver si se arreglaba la situación surrealista. Acudió en varias ocasiones a preguntar a la INSS, pero los funcionarios con los que se encontró no le supieron argumentar lo que ocurría y se limitaban a decirle que el papel, efectivamente, le daba derecho a la prestación. Con todo, la impotencia le llevó a usar una radio como altavoz para quejarse.
La solución
Curiosamente, un día después de aparecer en Rac1, el director provincial del INSS en Barcelona se puso en contacto con él para tranquilizarlo
y decirle que su caso se resolvería. Y así fue. La semana pasada, Manel cobró la pensión que le corresponde por el mes de abril y también el dinero que se le debía por los días de prejubilación que, efectivamente, le correspondían. En total, 9.500 euros.
¿Qué podemos aprender de esta historia?
Esta historia nos enseña que los trámites de la Seguridad Social pueden ser engorrosos y que cualquier error o irregularidad puede hacer que perdamos nuestros derechos. Es importante que estemos informados y que hagamos todas las consultas necesarias antes de tomar una decisión tan importante como la jubilación.
Además, esta historia nos muestra que la lucha y la perseverancia pueden dar sus frutos. Manel no se rindió y gracias a su lucha consiguió lo que le correspondía. Si te encuentras en una situación similar, no te rindas y lucha por tus derechos.
